martes, 29 de octubre de 2013

LA PULGA Y EL HUMANO. POR SERGI TORRES



La vida no se preocupa más por mí ni por ti que por una pulga. La vida no te recompensa si eres bueno ni te castiga si eres malo. Simplemente porque la vida, gracias a Dios, no piensa como un ser humano; no juzga. La vida sólo se dedica a ser lo que es: vida, manifestarse en infinitas formas de las cuales tú eres una al igual que yo.
Mi pregunta aquí es, ¿por qué seguimos intentando ser mejores personas y más buenas, cuando ya somos una forma plena de expresión de la vida? ¿No será que estamos juzgando a la vida? ¿No será acaso que nos hemos creído que la vida piensa como pensamos los humanos?

Muchos se “buenizan” sin darse cuenta de que eso les aleja de los “malos”, sin darse cuenta que esa distancia se llena automáticamente de miedo, dolor y sufrimiento. Otras hacen buenas obras para experimentar el premio que la vida les dará por ello sin saber que la vida no recompensa. La vida sigue dando todo a todos en todo momento.
Una de las cosas que más me fascinan es ver como los seres humanos sufrimos por la forma en la que hemos decidido vivir. Una forma de vivir que excluye a la vida misma. Es fascinante que eso ocurra y que la vida no lo juzgue como inapropiado, es más, lo permite y lo acepta. ¿Por qué?

NO HAY PARTE DE TI QUE NO SEA ESPIRITUAL. MENSAJE DE P'TAAH, OCTUBRE 2013


Interlocutora: Cuando estamos en este cuerpo físico, ocupamos gran parte del tiempo en cosas mundanas, actividades triviales que no nos producen ninguna emoción, que no tienen ninguna relevancia, ir a la compra, el papeleo, las cosas que nuestro cuerpo necesita para subsistir en este planeta. ¿Por qué está el ahora tan lleno de estas trivialidades cuando en realidad hay cosas mejores que hacer? 
P’taah: Oh querida creer que algo es “mejor”, sólo es un juicio. Y te acordarás de que lo hemos dicho, todo eso sólo es una percepción. Ahora bien, tú eres un gran ser espiritual cuando estás sentado en el baño o cuando haces la parada en el supermercado, mientras haces el amor o la guerra. Realmente nunca hay un momento en el que no eres un gran maestro espiritual. 
No hay ninguna parte de ti que no sea espiritual. Querida, tú sigues siendo espiritual cuando estás con el papeleo. Todo es un tema de percepción. Muchos de vosotros nos decís: -pero P´taah, me paso el tiempo en un trabajo muy mundano y lo que yo quiero es hacer un gran trabajo espiritual. 
Realmente se trata de encontrar la alegría y de estar presente en cualquier cosa que hagas. De estar verdaderamente en el presente. La vida es lo que sucede mientras tú estás arrepintiéndote del pasado y aterrorizada de tu futuro. 

miércoles, 9 de octubre de 2013

DESCUBRAMOS EL AMOR SOBRE TODAS LAS COSAS. POR ISHA


Es obvio que no me refiero a nada de eso cuando hablo de ser la totalidad de lo que uno es en cada momento, sino todo lo contrario, pues si estás muy presente en el momento, en el ahora, estás evolucionando más allá de los errores del pasado y creando y floreciendo un esplendoroso futuro.
Si vivimos cada momento atados al penar de nuestras faltas cometidas en otros tiempos, estamos abandonando el barco a merced de lo que suceda, sin llegar nunca al puerto de nuestra realización personal. Eso es irresponsabilidad. La vida es un regalo con todo su potencial, que abundantemente nos da todo cuando estamos presentes, abiertos a recibir y en acción permanente de dar.
La entrega es lo más vital que tienes que aprender, porque es sinónimo de confianza absoluta. Para mí, entrega y rendición son sinónimos, y puedo decir: “me rindo, me entrego, me abro a recibir, a fluir, confío en mi creación, y en cada momento me enfoco en eso, rindo mis emociones, rindo mis juicios, rindo todo, y luego vuelvo a enfocarme en la conciencia.
Siempre rindiéndome, entregando mi intelecto a mi corazón, la dualidad a la unidad del amor”. Si digo entrega o rendición no estoy diciendo darse por vencido, ¡la vida no es una guerra en la que si me rindo pierdo en manos del enemigo! ¡no! ¡es lo contrario, si me entrego, es que realmente vivo!

lunes, 7 de octubre de 2013

TIERRA DE SUEÑOS 25.05.2011. ENTREVISTA A SERGI TORRES

DARSHAN 24 JULIO 2013. ISHA ONLINE

PUDO LA LITURGIA DE UNA KAHUNA HABER CAUSADO ESTOS CAMBIOS? POR DARRELL SIFFIRD


Por Darrell Sifford - Martes, 02 de diciembre 1980 Reportero de Filadelfia-
Ni siquiera estoy seguro de por qué accedí a la entrevista - excepto que tenía curiosidad. Después de todo, ¿cuántas veces en tu vida tienes la oportunidad de conocer a un kahuna honesto y bondadoso?
No, no es un error tipográfico. Realmente hablé con un kahuna. Esa es una palabra hawaiana que significa "guardián de los secretos", pero que entre los hawaianos se refiere comúnmente a un maestro espiritual y sanador de lo que nos aflige --- ya sea física o psicológicamente.
Así que ahí estaba yo, con mi cuaderno y una pluma, y allí estaba ella, Morrnah Simeona, una mujer con aspecto de abuela en un suéter blanco y falda de franela gris, la hija de un miembro de la corte de la reina Liliuokalani, última soberana de las islas hawaianas.
Morrnah, que había dado una conferencia en la Universidad de Hawaii, estaba en el área de Filadelfia para un taller de fin de semana en lo que fue descrito como "la metafísica de Hawai", y que entonces estaba en Baltimore para una conferencia en la Universidad Johns Hopkins.
¿Qué es exactamente lo que hace - no como maestra, sino como un kahuna? Bueno, aunque mi Inglés es impecable como locutor de radio, tuve problemas para comprender lo que estaba diciendo. Esencialmente, parece ser esto….
Tendemos a ser atacados por nuestros viejos miedos, emociones, ideas y reacciones, que contribuyen no sólo a la angustia psicológica de hoy en día, sino también a enfermedades físicas - ya que muchas enfermedades pueden ser "atribuidas exclusivamente a las presiones que creamos." El papel de un kahuna es ayudarnos a sacar a la luz y borrar la basura que está contaminando nuestra existencia - de la misma manera que nos gustaría recuperar y eliminar información inútil almacenada en una computadora.
Ahora ya sé que no suena tan razonable, ¿verdad?

COMO DESCUBRIR LA CAPACIDAD DE ELEGIR. POR ISHA


En estos tiempos de opciones masivas se activan internamente una serie de mecanismos que nos llevan a evaluar, a comparar, a presionarnos, por el miedo a equivocarnos. En realidad, en nuestra vida, nos desenvolvemos de formas automáticas que nos llevan a repetir, una y otra vez, el mismo resultado, cuando no nos animamos a apretar el botón de “refrescar” en nuestra información y a explorar, con una nueva opción consciente, el momento presente, libres de miedos, recibiendo aquello que es.
Podemos animarnos a ser nuevos, y así, a evolucionar. Esto no implica el qué elegir, sino el sentir desde dónde estamos tomando esa decisión. Nuestra capacidad de elegir en “macro” se relaciona con cómo lo hacemos con las pequeñas cosas.
Por ejemplo: ¿por qué no escuchar a la compañera o al jefe con una actitud sonriente interna en vez de hacerlo con el resentimiento de un pasado choque? ¿Por qué no llevar flores a tu esposa o novia, al menos una, pequeña y perfumada, en vez de esa actitud de aburrimiento?
Queremos cambios, queremos entusiasmo, queremos renovar las cosas, pero pasivamente esperamos que nos vengan de afuera, que el otro las invente, que un nuevo portal de internet nos lleve por allí, cuando los verdaderos cambios son los internos. La vida se trata de variedad, de colores, de sabores, de olores, de estímulos, de interacciones, de miles de regalos que podemos recibir. ¿Pero qué sucede aquí? Lo nuevo requiere valentía, animarse, confiar.

MI PAIS SOY YO. POR JOCELYNE RAMNICEANU


Mi querido país está dividido, me pregunto si yo también lo estoy…. Pues sí, a veces me siento dividida por dos grandes emociones, el amor y el desamor, y allí englobo el dolor, el temor, la rabia y todos sus matices. Estamos en un mundo dual y la única manera de contrarrestarlo es centrarnos en nuestro corazón, encontrando el equilibrio, la paz, recordar quienes somos realmente y desligarnos de la ilusión de nuestra mente.
¿Suceden injusticias? Si en mi país suceden demasiadas injusticias, podría decir que son terribles. Entonces me pregunto si soy justa conmigo misma, si me trato con consideración o tal vez es lo opuesto,….  observo en mí desde la forma como me alimento, como cuido mi cuerpo, mis hábitos, como trato a otros seres etc. Y de repente viene a mi mente una situación donde me sentí injusta…
Sucedió con un gato, tengo ya 6, más de la cuenta para mi gusto, porque fueron llegando dos de ellos por separado, pequeñitos, buscando comida y al darles el alimento se fueron quedando . La otra gata que yo tenía hace 3 años, al no prestarle mayor atención quedó embarazada y luego tuvo cinco gatitos. Logré solo regalar a dos de ellos. En vista de esto hace tiempo tomé la decisión de no alimentar más a otros gatos que se acercaran del vecindario, que entran a la casa por el patio o el jardín del frente, a comer las sobras de mi perro. Mi numeroso grupo de gatos, menos mal que se van de paseo a otros lugares por largos períodos, y aparecen solo cuando tienen hambre, respetando un poco mi espacio.
Hoy ante la lluvia, en el patio trasero, uno de esos gatos grises aparentemente buscaba un lugar donde acobijarse; entró en la casa y apenas lo vi, lo espanté como siempre hago. Cuando este me miró, de repente sentí la injusticia, sentí como el pobre gato me miraba afligido.  Ya alimento a 6 y según mis creencias es suficiente. Este gato que siempre está escondiéndose al asecho entre las puertas y los rincones a la intemperie, observa como es marginado y solo cuando puede, sin ser visto, se apodera de alguna de las sobras. Si tal vez él pensara o pudiese hablar, me estaría diciendo…. “¿Porque a ellos sí y a mí no me das nada?”. Sentí lástima cuando corrió entre la lluvia en búsqueda de un nuevo refugio para acobijarse, pero mi decisión era firme,  NO tener más gatos. Y así me sentí: INJUSTA….