EL PRISMA SAGRADO DEL CORAZÓN. UNA REFLEXION SOBRE 11.11.11. Por KAI

Hay un lugar dentro de cada uno de nosotros, en lo mas profundo de nuestro Corazón, donde el pasado, presente y futuro se funden como uno mismo.

Ese espacio contiene el fractal de todas las partículas de la creación. Partículas de Luz danzan en una sincronía perfecta fundiéndose unas con otras en una eterna danza en espiral. En ese espacio la Luz infinita contiene y comprende a toda la Creación.

Cada una de las partículas de Luz se reflejan y reflectan unas a otras creando vida, música y color, sin separación ni diferencias, se unen y se mezclan en Unidad. En ese espacio de Luz Creadora todos los aspectos de la Creación se funden y se honran, son Uno Mismo, son Unidad. 

Ese espacio esta en nuestro corazón y contiene todo el Amor y el respeto  de la creación, no hay dualidad, no hay separación. Ese espacio continuamente esta inspirándonos a mirarlo todo desde esa integridad, pues es la memoria viva del Hogar, de nuestro origen Divino. Ese espacio es el Cristal Arcoiris de Nuestro Corazón, el espacio sagrado que contiene y reflecta a todos los Rayos de la Creación, la Luz del corazón es integra, no divide.

Hemos olvidado como mirar la vida desde ese espacio sagrado. Porque al mirar desde nuestra propia dualidad olvidamos que todo cuanto existe es Vida y proviene de la Luz.  Luz manifestada en distintas formas y colores, en distintas vibraciones, sin embargo, desde donde todo surge, la vida es impulsada desde su origen de vuelta hacia la Luz. Hemos olvidado que en algún momento, cada uno de Nosotros surgió de ese espacio sagrado de la Creación y con el propósito de aprender surcamos las galaxias y las dimensiones hasta llegar a este espacio donde experimentamos la dualidad. Sin embargo, esa Luz infinita y eterna que todo lo contiene es nuestro único y real origen, todos somos un impulso Divino proveniente de la creación.

Este 11.11.11 es un momento sagrado. Un momento en el cual podremos ingresar al recinto Sagrado del corazón. Las puertas del corazón cristalino se abrirán para darnos la oportunidad de ver, quizá por primera vez a través de los ojos de la Unidad y con ello disolver nuestra propia separación y perdonar.

Perdonarnos por cada uno de los momentos en los cuales usamos nuestra energía divina para crear dualidad.

Perdonar todas las luchas que como Humanidad hemos librado. Perdonar por todos los momentos en los que hemos Juzgado.

Perdonar porque en ese olvido creamos y nos creímos enemigos.

Perdonar por todos los momentos en que nos enfocamos en las diferencias en lugar de las igualdades.

Perdonar nos lleva a la compasión. Y compasión es respeto. Es mirar desde ese espacio de Silencio interior que todos estamos aprendiendo, que no hay mejores ni peores, solo Seres Divinos que viven y aprenden, existiendo en su propia búsqueda. Mirar y respetar que cada uno lleva un recorrido sagrado y a pesar de las diferencias, al final todos llegaremos al mismo lugar.

Ese lugar es el Espacio Divino de la Gran Creación, de donde todos hemos surgido. Los multiversos son infinitos, así como las verdades y caminos. Por ello liberemos, perdonemos. Este es el momento Sagrado. La Tierra nos convoca a co-crear la Unidad y cada uno es clave para ello.

Somos Amados y Bendecidos en Amor y Alegria siempre!