martes, 1 de febrero de 2011

EL MIEDO AL RECHAZO Y A QUE NOS JUZGUEN

Me preguntas cómo hacer para dejar de tener miedo al rechazo, a que te juzguen por hacer las cosas mal, y se me ocurre que el revertir esto puede desencadenar un gran cambio en tu vida.
lunes, 24 de enero de 2011

Justamente éste es el miedo más grande que tienen los seres humanos: el de no recibir aprobación de los demás. Y es justamente por eso que mentimos, por eso que usamos máscaras, por eso que fingimos ser algo que no somos, hasta que finalmente terminamos tan enfocados en la aprobación exterior que perdemos la aprobación que necesitamos de nosotros mismos, y es como si nos convenciéramos de que hay algo fundamentalmente mal con nosotros mismos.
Y justamente de esto se trata lo que comparto hoy con ustedes: el establecer la conciencia permanente, la propia conciencia interna, la paz interna, la dicha, el amor incondicional a uno mismo, que es el tesoro más valioso que uno puede tener.
Ahora bien, esto requiere una acción. ¿Y cuáles son las acciones de la conciencia?:
El hablar la verdad, el ser transparentes, el ser inocentes, vulnerables. Todas las cosas que siempre escondemos, porque escondemos nuestras emociones, lo que sentimos, no decimos lo que realmente pensamos, todas las cosas que escondemos son justamente las acciones de la conciencia. Entonces, para poder ir más allá de eso uno tiene que estabilizar la conciencia y desde allí la verdad de quién soy. Esto demandará ciertas acciones, y entonces eso que aspiro y anhelo comenzará a transformarse en mi realidad.
Comenzaré a ser real en el momento preciso, comenzaré a ser vulnerable y a decir lo que siento, y entonces no me importará lo que piense la gente ya que será más importante lo que yo sienta, y además porque cuando me amo a mi mismo lo externo me refleja eso perfectamente, cuanto más íntegro y transparente sea yo, eso se verá reflejado en todo mi alrededor.
Pero cuando yo estoy dudando, criticándome o preocupándome por lo que la gente piensa, justamente el espejo de lo externo me reflejará esa dualidad. Y para algunas personas ésa es una dualidad extrema, especialmente si hay un apego extremo a recibir esa aprobación, porque entonces toda mi atención estará enfocada en lo externo y controlando lo que el afuera me está dando. Y seguramente nos encontraremos con juicios como: ¡no lo estás haciendo bien! ¡Me ofendiste al decir eso! ¡No eres suficientemente bueno! Nos reflejará justamente todo eso que siempre tratamos de evitar, y lo comenzarás a ver con mucha claridad.
Entonces, ¿qué te parece si como parte de acelerar este proceso de crecimiento interno, de expandir el amor y la conciencia, comienzas a hacerte una listita de aquellos lugares en los que haya mentiritas, y cómo enfrentarlas y cambiarlas? Y también comienza a anotar los resultados o el sentir de estos cambios. De seguro te vas a empezar a sentir mejor contigo mismo, menos estrés, menos control en las relaciones.
Además, haz una lista de los lugares en los que podrías comenzar a ser más transparente e íntegro. A veces mentimos para ganar centavos a favor, y resulta que con eso nos abandonamos y alimentamos nuestro sentimiento de escasez. ¿Qué pasará cuando en esos lugarcitos no venderás tu verdad por centavos, sino que cotizarás más la transparencia? ¿Qué sientes cuando eliges corromperte menos en pequeñas cosas?
¡A ver, a ver! Y a anotar los pequeños cambios y a felicitarse por ir creando una vida en expansión de conciencia en cada momento, cada lugar y cada acción. Hasta la próxima semana.
Por ISHA


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